Callejones llenos de color!

 Hola ¿Qué tal?

La semana pasada tuve la oportunidad de visitar una de las tantas y tantas  callejuelas/callejones que se encuentran en el barrio de Rosemont- La Petite Patrie, en Montreal. En esa hermosa tarde de Septiembre presencié como los vecinos de la cuadra se ponían de acuerdo para pintar y decorar los postes de madera, las puertas de sus estacionamientos y hasta las alcantarillas de la cuadra. Aquí te explico más.

Los callejones en Montreal.

Lo primero que tienes que saber si no vives en Montreal es que la ciudad está llena de estas calles/callejones en la parte trasera de las casas y edificios. Estas pequeñas calles constituyen una zona para el descanso y diversión de todos los que habiten en la zona. Es común que la parte de atrás de una casa colinde con sus vecinos y que tenga una puerta trasera con acceso a una calle muy pequeña que sólo se transita por la gente de la zona. Si alguien tiene la suerte de tener un estacionamiento para su auto, dicho estacionamiento también quedará en esta parte trasera. 

Así pues, es muy común asistir a esos callejones para participar de fiestas/cumpleaños de los niños, tardes de bbq e invitaciones en general. 

Tendencia cada vez en crecimiento: 

Cuidar y mantener estos callejones se ha hecho una tendencia cada vez más importante para los vecinos y propietarios en Montreal. Bajo el lema de transformar los callejones en zonas más verdes y bio diversas, los vecinos se organizan y cuidan su zona. Es aquí donde la organización "Vive la ruelle" creada por el venezolano Francisco Toro juega un papel muy importante. 

Con ayuda de las alcaldías y organizaciones privadas, Francisco organiza la visita de su equipo para entregar las pinturas y todos los implementos necesarios para transformar estas callejuelas. Su organización guía la experiencia y coordina a las personas para  que todo salga bien y en el tiempo establecido para ello. 

Cuando visité el callejón, pude presenciar un verdadero trabajo de equipo en donde los vecinos proponen una temática y "Vive la ruelle" ofrece todos los materiales para trabajar durante un sábado completo. 

El ambiente es increíble! Todos se ayudan y aportan su granito de arena para este hermoso proyecto. Al final del día los resultados son hermosos y la sonrisa en todos los vecinos es simplemente contagiosa. Diría que el sentido de pertenencia se refuerza y todos se sienten con la responsabilidad de cuidar y preservar este rincón tan mágico y tan único. 

Doy las gracias a mi amiga Gabi Di Stefano y a Francisco (Quico) por haberme invitado y por haber presenciado esta hermosa transformación. 

Si quieres que tu callejón participe de esta bella iniciativa, te invito a contactar a tu alcaldía y a la organización "Vive la ruelle", aquí te dejo el enlace. 

Embellecer los espacios es tarea de todos y en Montreal es un trabajo que se hace en equipo!

Gracias por leerme y hasta la próxima!